El paquete de recuperación y el presupuesto 2021-2027 de la Unión Europea contribuirá a la reconstrucción de Europa tras la crisis provocada por la pandemia COVID-19, apoyando la inversión para llevar a cabo las transiciones ecológica y digital.
El paquete global de fondos que se van a aportar a los estados miembros está formado por 1,82 billones de euros, los cuales se reparten en:
Del paquete económico que conforman los fondos del Next Generation UE, a España le corresponden 140.000 M€, de los que 72.700 M€ son subvenciones y 67.300 M€ préstamos. Esto hace que se presente una oportunidad única para que tanto empresas como Administraciones puedan beneficiarse y transformar la economía nacional, ya que ellos serán los agentes activos de la recuperación. Para ello se hace necesaria la colaboración público-privada y de esta forma salir juntos y reforzados de la crisis económica actual.
Tal y como hemos comentado, el importe total del fondo Next Generación EU asciende a 750.000 M€, los cuales van a ser asignados a impulsar siete programas:
A su vez, los fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia se centrarán en tres entornos:
Pero, ¿todos estos paquetes de ayudas como se materializarán en España? España es uno de los estados de la Unión Europea que más beneficiado ha salido en el reparto con un total de 140.000 millones de euros, el 18,6% del total de los fondos europeos Next Generation EU. De estos, 67.000 millones son préstamos a devolver y 72.700 millones a fondo perdido.
“España Puede” es el nombre con el que se ha bautizado al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la economía en nuestro país y que ha establecido que las comunidades autónomas sean las encargadas de canalizar el grueso de los fondos europeos en España, seguidas por el Estado y por los ayuntamientos en menor medida. Estas ayudas y subvenciones tendrán unos límites máximos en función del tipo de proyecto y de cada Comunidad Autónoma.
Los 72.700 millones a fondo perdido se repartirán en los primeros tres años (2021-2023) para de esta forma maximizar su impacto beneficioso sobre la reconstrucción rápida de la economía. Los préstamos de 67.000 millones se utilizarán para complementar en una fase posterior la financiación de los proyectos en marcha. A esta inyección de capital en nuestro país se sumarán los más de 79.000 millones de euros de los fondos estructurales y de la Política Agrícola Común para 2021-2027.
El Plan de Recuperación “España Puede” se centra en cuatro ejes fundamentales:
España contará con tres líneas de distribución de los fondos del plan “España Puede”:
El primer instrumento de todos, los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica o PERTE, son una nueva figura de colaboración público-privada entre Administraciones, empresas y centros de investigación. Servirán para identificar los proyectos estructurales con gran capacidad y que ayuden al crecimiento económico, el empleo y la competitividad.
El Consejo de Ministros será el encargado de declarar si un determinado proyecto es PERTE, para lo cual tendrá que acompañarse de una memoria explicativa que identifique cuáles son las medidas de apoyo y colaboración público-privada proyectadas y los requisitos que tienen que cumplir los posibles interesados. Los departamentos ministeriales deberán elaborar en el plazo de un mes, la programación anual de los contratos que van a ser necesarios para la puesta en marcha de estos proyectos, los cuales podrán recibir anticipos de hasta el 50% para acelerar su ejecución.
La tramitación de las solicitudes de participación en las convocatorias adscritas al Plan de Recuperación “España Puede” se realizará mediante las sedes electrónicas de los departamentos ministeriales y organismos competentes.
Para acceder a los fondos europeos en España las empresas deberán seguir una serie de pasos que variarán en función de si se opta a una subvención y contrato o si se opta a participar o presentar un PERTE.
Podrán acceder a estos fondos los proyectos nuevos o en ejecución desde el 1 de febrero de 2020. Los proyectos empresariales que opten a subvenciones tendrán que ser cofinanciados al mismo tiempo con recursos públicos y privados, por lo que habrá que contar con financiación complementaria o buscar fuentes alternativas de financiación. No obstante, en algunos proyectos, como por ejemplo los de digitalización de las pymes, no se requerirá cofinanciación.
Para que un proyecto empresarial pueda acceder a algún tipo de ayuda o subvención tendrá que demostrar a través de una serie de indicadores que persigue los siguientes objetivos: